El 5 de agosto de 1888, sin decírselo a su marido y sin el permiso de las autoridades, partió en un viaje para cruzar el país con un automóvil y sus hijas—siendo así la primera persona en usar un automóvil en largas distancias—. Aunque el motivo de su viaje era visitar a su madre también lo era demostrar a su marido que el invento que juntos habían creado se convertiría en un éxito financiero. Durante el camino encontró numerosas complicaciones: tenía que comprar éter de petróleo para usarlo como combustible de boticarios. En un determinado punto un herrero tuvo que ayudarla a reparar una cadena. Tuvo que reparar los frenos y de esa manera inventó los forros de frenos. También tuvo que usar un largo alfiler para limpiar un tubo de combustible que se había bloqueado y aislar un alambre con una liga. Cuando se disponía a regresar avisó a su marido del éxito del viaje mediante un telegrama. A la mañana siguiente emprendió su viaje de regreso.
Como conclusión de su viaje, la pareja decidió añadir un engranaje adicional para subir colinas y forros de frenos.
En 1944, en su 95º cumpleaños, fue honorada por la universidad de Karlsruhe con el título de Senadora Honorable. Dos días después murió en su pueblo.
En 1944, en su 95º cumpleaños, fue honorada por la universidad de Karlsruhe con el título de Senadora Honorable. Dos días después murió en su pueblo.
Daniel siempre debes acompañar tus entradas de una imagen pues queda más presentable.
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